Segundo clásico del día. Animals, de Pink Floyd, 1977
"El verso final explora varios aspectos de la vida de negocios y cómo se compara con los perros, por ejemplo tomando oportunidades y ser entrenados para «no escupir en el ventilador», perdiendo su individualidad «rota por personal entrenado», obedeciendo a sus superiores «ajustados con collar y cadena», ganando tratos por buen comportamiento «dándoles una palmada en el trasero», siendo mejores que todos los demás «saliéndose del grupo» y conocer a todos, pero pasar menos tiempo con la familia siendo «sólo un extraño en casa». Cada línea de este verso empieza con la palabra «Who» («Quien..»), en la que surgía comparación con el poema
Howl de Allen Ginsberg.
Esta canción y el uso de la palabra «Who» al principio de cada línea del verso ilustra la influencia que
Roy Harper tuvo en la banda. Roy Harper había usado esta técnica en la canción «The Lord’s Prayer» de su álbum Lifemask, el cual incluía a David Gilmour en la guitarra. Harper cantó sobre 90 líneas de cada verso empezando con las palabras «whose» y «who» (quienes y quien). Roy Harper también cantó en la canción «Have A Cigar» del álbum
Wish You Were Here."
El tema incluye una curiosidad única en el mundo de la música en discos de vinilo. A la mitad del tema hay una referencia a «la mala sangre que se va endureciendo y volviendo piedra» (the bad blood slows and turns to stone), y al final del párrafo esta sangre convertida en piedra termina hundiendo al individuo. El autor entonces le desea un buen descenso cuando sentencia: «Así pues que tengas un buen hundimiento, mientras solitario te hundes, arrastrado por la piedra» (So have a good drown, as you go down, all alone, dragged down by the stone.). Al finalizar está última oración se produce un eco de la palabra «piedra» (stone) que se repite muchas veces y que comienza a mutar en un sonido electrónico que da al oyente toda la sensación de algo que cae y se va hundiendo indefinidamente. La curiosidad surge de que si se da vuelta el disco de vinilo Animals cuando el eco de la piedra que cae se extingue puede comprobar que del otro lado del disco, en el tema Ovejas (Sheep), se pueden escuchar algunas repeticiones de este sonido electrónico en que mutó la palabra «piedra» (stone), con lo que el hundimiento fue tan profundo que llegó hasta el otro lado del disco.
Animals está basado en términos generales, en la
fábula política de
George Orwell,
Animal Farm, donde varias castas de la sociedad están representadas a través de diferentes animales:
perros como los representantes de la ley,
cerdos como implacables mandatarios y
ovejas como peones descerebrados. Mientras la novela se enfoca en el
comunismo, el álbum es una crítica directa a la sociedad de consumo.