Delphi Technologies lanza Hartridge DPF200 Master para limpieza de filtros de partículas. Está diseñada para aplicaciones de turismos y vehículos comerciales medios y ligeros, tanto de gasolina como de diésel. Así es la Hartridge DPF200 Master para limpieza de filtros de partículas. Delphi Technologies ha lanzado el Hartridge DPF200 Master, la última incorporación a su gama de limpieza DPF (filtro de partículas diésel), que proporciona una solución de limpieza y diagnosis para filtros de partículas de vehículos de gasolina y diésel que es, según la enseña, "más rápida, segura y eficaz que otras soluciones con detergentes o procesos de regeneración forzada". Así, se trata de una solución que proporciona a los talleres un acceso ventajoso al creciente mercado de limpieza y, al mismo tiempo, otro servicio de valor añadido que pueden ofrecer a sus clientes. La DPF200 Master está diseñada para su uso junto con la serie DPF300 Master y ofrecer, así, un paquete completo de limpieza DPF para turismos y vehículos comerciales ligeros, medios y pesados. "Con cada vez más vehículos equipados con filtros de partículas, la demanda de servicios de limpieza de filtros está al alza. Solo en Europa, hay más de 60 millones de turismos y vehículos comerciales medios y ligeros que incorporan filtros de partículas, lo que generará la necesidad de mantenimiento en el Aftermarket. Esto representa una oportunidad de negocio para los talleres que dispongan del equipo adecuado", asegura Lee Jacobs, director de productos técnicos y estrategia global de Hartridge. Con la nueva Hartridge DPF200 Master de Delphi Technologies, los talleres pueden limpiar de forma rápida y segura filtros de partículas bloqueados, contribuyendo a la mejora del ahorro de combustible y a la reducción de emisiones del vehículo, ya que aumenta considerablemente la vida útil del filtro, evitando la necesidad de su sustitución, garantizando un servicio más rentable, y acortando los tiempos de inactividad no deseados en el futuro del vehículo. El software integrado en la máquina incluye automáticamente pruebas de flujo y fases de diagnosis exclusivas de detección de "celdas que fallan", capaces de identificar un filtro defectuoso antes de la limpieza y evitar, así, costosas pérdidas de tiempo. Con un proceso patentado de limpieza con aire seco bidireccional que envía grandes volúmenes de aire comprimido a ambos extremos del filtro, la máquina es, además, más rápida y segura que las soluciones de limpieza alternativas disponibles en el mercado. De hecho, "los talleres pueden limpiar numerosos filtros al día, lo que genera grandes márgenes de beneficios, al tiempo que ofrecen un mejor servicio para sus clientes. Un taller normal, que diagnostique y limpie tan solo cuatro filtros a la semana, amortizará una DPF200 Master en menos de dos años". https://www.infotaller.tv/electrome...ies-Hartridge-DPF200-Master_0_1389161092.html
Es una buena idea, pero la investigación tendría que ir más por el lado de "evitar emisiones", no "menos emisiones que luego te limpiamos el fap .... y el bolsillo".
Y bueno, sólo hace falta que digan que la máquina de Delphi se limpia periódicamente en el Mar Menor de Murcia.
