UKH46
Forista Legendario
NO cabe duda que las sentencias, son lo que son y no queda más coj*nes que acatarlas, pero..........NO ES JUSTO.
Dos años y tres meses de cárcel para los acusados del atropello mortal de Pumarín
La juez considera a los dos conductores que acabaron con la vida de dos septuagenarias responsables de homicidio por imprudencia grave
03:38
La furgoneta tras el brutal accidente. juan plaza
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Las importantes lesiones de una de las heridas retrasaron la vista del juicio. Gijón
R. GARCÍA
La juez del Juzgado de lo penal número 3 ha condenado a un total de cuatro años y medio de cárcel a Íñigo O. R. y David G. A., los dos conductores gijoneses acusados de provocar el brutal accidente de tráfico que costó la vida en el año 2010 a dos septuagenarias vecinas de Pumarín. Los imputados no podrán además conducir vehículos a motor en los próximos dos años.
El suceso que se acaba de resolver en las salas judiciales tuvo lugar alrededor de las cinco de la tarde del 8 de marzo del año 2010 en la confluencia entre la avenida Gaspar García Laviana y la calle Cataluña. Las dos víctimas mortales del siniestro -Isabel Sánchez Friera, de 71 años y vecina de la calle Cataluña, y María del Carmen Carnicero Díaz, de 74 y vecina de la calle Badajoz-, estaban esperando en un paso de peatones poco antes del choque. Las septuagenarias se encontraban a escasos metros de una joven, Eva Calvo, que resultó herida grave en el siniestro.
La colisión que provocó el accidente tuvo lugar, tal y como relata la juez encargada del caso, como consecuencia de la «conducción negligente y merecedora de reproche penal» de los dos conductores implicados. Íñigo O. R. circulaba entonces por la avenida Gaspar García Laviana sin respetar la distancia de seguridad con el resto de turismos. El encausado intentó, poco antes del atropello, adelantar a un Citroën Saxo que se encontraba parado en un semáforo. Al tratar de realizar la maniobra, el joven perdió el control de su vehículo y golpeó una furgoneta que circulaba por el carril izquierdo y en la que viajaba el segundo imputado en el procedimiento, el también condenado David G. A., que conducía según uno de los peritos a una velocidad de 84 kilómetros por hora en una vía con la velocidad limitada a los 50 kilómetros por hora. El choque entre ambos vehículos provocó que la furgoneta se saliera de la calzada e invadiera la acera donde se encontraban las dos septuagenarias y la joven Eva Calvo, «llegando a subir al bordillo de la acera, subiendo a otro bordillo después del atropello y colisionando contra un árbol y un cartel publicitario».
Los dos conductores gijoneses que ahora acaban de ser condenados judicialmente a una pena de dos años y tres meses de cárcel cada uno, fueron detenidos poco después del suceso. Fue entonces cuando comenzó un procedimiento judicial que ahora da sus últimos pasos.
El suceso causó en su momento un gran impacto en una zona en la que los vecinos llevaban ya tiempo quejándose de los excesos de velocidad que se producían en la avenida Gaspar García Laviana. Las protestas llevaron incluso al Ayuntamiento a instalar en la zona un nuevo «foto rojo» con el que se multa a los conductores que no respetan la obligación de detener su marcha ante un semáforo cerrado.
La sentencia del Juzgado de lo penal de Gijón que se acaba de conocer aún puede ser recurrida ante la Sección Octava de la Audiencia Provincial de Asturias. Un tribunal con sede en Gijón y con competencias en materia penal. En el procedimiento judicial estuvieron presentes el representante de la acusación particular -ejercida por la familia de una de las fallecidas-, fiscalía y defensa. El abogado acusador ya ha adelantado su voluntad de acatar la sentencia.
Dos años y tres meses de cárcel para los acusados del atropello mortal de Pumarín
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R. GARCÍA
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La colisión que provocó el accidente tuvo lugar, tal y como relata la juez encargada del caso, como consecuencia de la «conducción negligente y merecedora de reproche penal» de los dos conductores implicados. Íñigo O. R. circulaba entonces por la avenida Gaspar García Laviana sin respetar la distancia de seguridad con el resto de turismos. El encausado intentó, poco antes del atropello, adelantar a un Citroën Saxo que se encontraba parado en un semáforo. Al tratar de realizar la maniobra, el joven perdió el control de su vehículo y golpeó una furgoneta que circulaba por el carril izquierdo y en la que viajaba el segundo imputado en el procedimiento, el también condenado David G. A., que conducía según uno de los peritos a una velocidad de 84 kilómetros por hora en una vía con la velocidad limitada a los 50 kilómetros por hora. El choque entre ambos vehículos provocó que la furgoneta se saliera de la calzada e invadiera la acera donde se encontraban las dos septuagenarias y la joven Eva Calvo, «llegando a subir al bordillo de la acera, subiendo a otro bordillo después del atropello y colisionando contra un árbol y un cartel publicitario».
Los dos conductores gijoneses que ahora acaban de ser condenados judicialmente a una pena de dos años y tres meses de cárcel cada uno, fueron detenidos poco después del suceso. Fue entonces cuando comenzó un procedimiento judicial que ahora da sus últimos pasos.
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La sentencia del Juzgado de lo penal de Gijón que se acaba de conocer aún puede ser recurrida ante la Sección Octava de la Audiencia Provincial de Asturias. Un tribunal con sede en Gijón y con competencias en materia penal. En el procedimiento judicial estuvieron presentes el representante de la acusación particular -ejercida por la familia de una de las fallecidas-, fiscalía y defensa. El abogado acusador ya ha adelantado su voluntad de acatar la sentencia.
