Ayer por la noche, viniendo de Madrid a Oviedo, pasé por encima de un perro en la autopista. Iba a 120 km/h a la salida de Mieres y al volver al carril derecho detrás de otro vehículo y con no demasiada separación :embarrassed: me encuentro con un perro muerto en mitad del carril sin tiempo para hacer nada. El perro era de los grandes, unos 40 kilos tranquilamente. Pasé por encima con las ruedas izquierdas y sonó un golpetazo metálico que me dolió como una patada en los huevos. El coche se comportaba bien así que proseguí viaje. En Oviedo hice un análisis visual y a ojo todo está correcto, no tengo ni toque en el faldón; supongo que ya habría pasado algún camión por encima. Creo que gran parte del golpe se lo han comido los balones 235/60-16. Si llevase la llanta opcional de 18" no sé si ahora estaría tan tranquilo :err:
El coche espero mirarlo un poco más a fondo hoy pero en principio creo que no tendrá nada. Con el perro nada se puede hacer aunque repito que el pobre ya estaba KO cuando me lo comí.
Es más peligroso cuando le atropellas tú el primero. Al verlo en movimiento inconscientemente puedes intentar esquivarlo y darte un buen susto. Al menos cuando te lo encuentras ya KO pasas por encima y esperas que no le pase nada al coche.
Otra vez atropellé un gato con un 325i E46 a 160 km/h. No hice nada ya que era de noche y cuando lo vi lo tenía a 20 metros. Como para dar bandazos a 160... El coche sufrió algún daño como rotura del cubrecarter y se abolló un poco la polea del compresor del aire acondicionado.