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En Practicas
«El coche cogió la curva tan fuerte que se dio contra otros dos que estaban aparcados y casi derriba dos farolas», relataban los testigos poco después del siniestro que le acababa de costar la vida a un joven de 18 años mientras el conductor del vehículo no sufría lesiones graves al volcar sobre la acera en el paseo de Juan Carlos I, a la altura el antiguo mercado central, a primera hora de la mañana de ayer.
El aparatoso accidente ocurrió segundos después de las 7.00 horas, cuando los dos ocupantes de un BMW circulaban por las calles desiertas de Pajarillos rumbo al barrio de Delicias, donde residían.
El turismo recorría la calle Tórtola, por un lateral del viejo mercado, rumbo a Juan Carlos I y al intentar coger la curva de izquierdas hacia San Isidro perdió el control del vehículo por completo, lo que hizo que invadiera el carril contrario. Allí impactó contra un coche estacionado, salió disparado de vuelta a la calzada hacia San Isidro y chocó contra un monovolumen aparcado. «El golpe fue tan fuerte que el Citroën Picasso salió despedido y dobló la base de una farola de más de siete metros de altura hasta casi tirarla», añaden los testigos. El BMW siniestrado siguió su recorrido por la acera, destrozó literalmente un tramo de diez metros de verja de hierro forjado, volcó y se detuvo boca abajo contra una farola. Este último poste también quedó doblado y su cabezal salió disparado.
Los dos ocupantes del turismo, ambos de nacionalidad búlgara, quedaron atrapados en su interior y para cuando llegaron los primeros testigos y agentes a socorrerles ya había fallecido el copiloto. Y eso a pesar de que a escasos metros del lugar del siniestro, justo enfrente de la piscina cubierta, se encontraba por casualidad una patrulla de la Guardia Civil haciendo un control.
Muere un joven al volcar un coche en el paseo de Juan Carlos I. nortecastilla.es
El aparatoso accidente ocurrió segundos después de las 7.00 horas, cuando los dos ocupantes de un BMW circulaban por las calles desiertas de Pajarillos rumbo al barrio de Delicias, donde residían.
El turismo recorría la calle Tórtola, por un lateral del viejo mercado, rumbo a Juan Carlos I y al intentar coger la curva de izquierdas hacia San Isidro perdió el control del vehículo por completo, lo que hizo que invadiera el carril contrario. Allí impactó contra un coche estacionado, salió disparado de vuelta a la calzada hacia San Isidro y chocó contra un monovolumen aparcado. «El golpe fue tan fuerte que el Citroën Picasso salió despedido y dobló la base de una farola de más de siete metros de altura hasta casi tirarla», añaden los testigos. El BMW siniestrado siguió su recorrido por la acera, destrozó literalmente un tramo de diez metros de verja de hierro forjado, volcó y se detuvo boca abajo contra una farola. Este último poste también quedó doblado y su cabezal salió disparado.
Los dos ocupantes del turismo, ambos de nacionalidad búlgara, quedaron atrapados en su interior y para cuando llegaron los primeros testigos y agentes a socorrerles ya había fallecido el copiloto. Y eso a pesar de que a escasos metros del lugar del siniestro, justo enfrente de la piscina cubierta, se encontraba por casualidad una patrulla de la Guardia Civil haciendo un control.
Muere un joven al volcar un coche en el paseo de Juan Carlos I. nortecastilla.es
