Tengo una relación ODIO-ODIO con estos aparatos. Mis padres necesitaban una segunda televisión en otro sitio y se barajaban dos opciones: comprar para el otro sitio una tele nueva o comprar una tele nueva para casa y mandar esta al otro sitio, y se optó por esta segunda opción.
La antigua era una Samsung del montón que era 1080 con puerto de red y funciones MUY básicas de televisión inteligente (solo tenía reproductor DLNA, no tenía Youtube ni ningún tipo de aplicaciones similar ni "sistema operativo"). Tenía entrada VGA, componentes, euroconector con RGB y creo que DVI, además de TDT. No era una gran tele, pero le metías una señal de vídeo y te la mostraba. Le decías que se encendiese y se encendía. Le decías que querías cambiar de fuente y te la cambiaba. Todo en orden.
La nueva es una Samsung "hintelijente" que ya ha perdido todas las opciones analógicas (calvario conectar un ordenador DisplayPort y VGA a esta tele que solo tiene HDMI) pero lo que más me mosqueó fue que, nada más encenderla, te pide que aceptes los términos y condiciones. ¿Qué términos y condiciones? Es solo una puñetera televisión.
Continuamente le decía que no, porque la televisión es usada como monitor de un aparato de televisión que suele ser Orange o Vodafone (vamos cambiando, y ahora volveremos a Orange). No me dejaba ni cambiar a un HDMI para mostrar lo que yo quisiese. No, tienes que aceptar los términos y condiciones de la aplicación "Samsung TV". ¿Para qué, si no voy a usar eso?
No sé cómo lo hice pero, sin aceptar los términos y condiciones, logré "meterme" en la televisión como tal. Ahora viene lo peor de todo.
Encender la televisión es un suplicio. El mando tiene un piloto LED que te dice cuándo estás pulsando un botón. Cuando está apagada y la quieres encender, parpadea TRES veces, es decir, sabe que la quieres encender, pero no se enciende. Hasta que no insistes un montón de veces y pulsas otros botones, no te hace caso.
Moverse por los menús es un dolor. Va lentísimo y solo cuando ella quiere. Seleccionar el HDMI 2, por ejemplo, supone intentar acceder varias veces al menú para, al menos, que te dé la opción. La cruceta funciona, pero en la televisión responde cuando ella quiere.
Moverse entre menús es otro dolor. Nuevamente, los botones del mando funcionan cuando quiere. El mismo mando sabe que los estás pulsando, pero la televisión no responde. Es más, las pulsaciones son ignoradas y no se representan después, no es que pulses 50 veces izquierda y se mueva 50 veces, a destiempo, a la izquierda.
¿No existen televisiones NORMALES o que, simplemente, funcionen NORMAL? Es decir, que cuando quieras encenderla, se encienda y que cuando quieras entrar en el menú, entre...
