Las marcas que han dado marcha atrás porque su apuesta por el coche eléctrico era demasiado ambiciosa
11 febrero, 2025
Todo parecía ir viento en popa y a toda vela, hasta que la industria del automóvil se ha dado de bruces con la realidad. En 2024 no sólo no ha terminado de despegar el
coche eléctrico, sino que, además se ha producido una desaceleración en las ventas. Se venden más, pero a un ritmo mucho menor. Esto ha llevado a algunas marcas a dar marchar atrás en su apuesta por el coche eléctrico, al darse cuenta de que era demasiado ambiciosa.
En los último dos-tres años, muchos fabricantes anunciaron a bombo y platillo estrategias a medio y largo plazo, cuya meta era vender únicamente modelos eléctricos a finales de la presente década. Ahora, se han visto obligados a rectificar, posponiendo las fechas iniciales. ¿Qué marcas han dado marcha atrás en relación con el coche eléctrico? Las siguientes…
Porsche
El caso de
Porsche es un poco diferente. La marca se puso un objetivo para finales de la década: que los modelos eléctricos representasen más del 80% de sus ventas. Sin embargo, ya no está tan seguro de alcanzarlo. Según
Reuters, un portavoz de la compañía alemana acaba de reconocer que “la transición a los coches eléctricos está llevando más tiempo del que pensábamos hace cinco años”.
No obstante, a diferencia de las otras marcas que sí han modificado su hoja de ruta, en Zuffenhausen continúan con su idea de que cuatro de cada cinco coches vendidos en 2030 sean a baterías, pero con un condicional: “dependerá de la demanda de los clientes y del desarrollo de la electromovilidad”. Por tanto, deja la puerta abierta a posibles cambios.
Y los cambios parece que han llegado debido a los resultados económicos de 2024, con unos beneficios del 14%, cuando lo esperado a medio plazo era de un 20. También las predicciones para 2025 meten el miedo en el cuerpo, con una caída del margen operativo sobre las ventas de entre el 10 y el 12%.
Por ese motivo, ahora se diseñarán coches eléctricos, pero para que sea posible, en un futuro, equipar un sistema de propulsión con motor de combustión.
También, que ampliará su gama de modelos con motor de gasolina y añadirá más híbridos enchufables.
Audi, una de las marcas que han dado marcha atrás en su apuesta por el coche eléctrico
Audi tiene el objetivo de convertirse en marca totalmente eléctrica en 2033 y, por el momento, no ha tocado esa fecha. Sin embargo, la marca está poniendo ahora mayor énfasis en los coches híbridos enchufables y está pensando retirar el Q8 e-tron antes de lo previsto, debido a la caída de la demanda. Según Autocar, el CEO de Audi, Gernot Döllner, reveló recientemente que el Grupo Volkswagen cree que el coche eléctrico necesitará más tiempo “del que pensábamos inicialmente” y ve los híbridos enchufables como un puente hacia un futuro eléctrico.
Por ello, ofrecerá más híbridos enchufables en el futuro y, además, los sistemas de propulsión alternativos seguirán presentes hasta 2033. Para facilitar la transición, Audi ha creado una nueva familia de motores de combustión para los futuros híbridos enchufables con baterías más grandes que garantizan autonomías eléctricas de hasta 100 kilómetros.
Ford
Ford anunció en 2021 que solo vendería coches eléctricos en 2030. Sin embargo, ha reconocido que ese plan ya no es viable. Entre tanto, también planeó que todos sus modelos pasaran a ser PHEV o EV en 2026, pero Marin Gjaja, director de operaciones del Ford Model E, ha reconocido que no hay suficiente demanda de clientes para justificar la venta exclusiva de vehículos eléctricos.
En declaraciones a
Autocar, Gjaja señaló que no cree que puedan “apostar por nada hasta que nuestros clientes lo decidan y eso avanza a ritmos diferentes en todo el mundo. Creo que los clientes han votado y nos han dicho que era demasiado ambicioso, eso es lo que yo diría, y creo que todo el sector lo ha descubierto por las malas. También diría que la realidad tiene una forma de hacerte ajustar tus planes”.
Asimismo, Gjaja cree que los principales motivos que explican la desaceleración en la demanda de coches eléctricos son el elevado coste de los vehículos y la supresión de las ayudas públicas. De cara al futuro, la adopción de un enfoque multienergía será importante para garantizar que la marca siga siendo competitiva en Europa.
Cadillac
Otra marca que ha dado marcha atrás en su apuesta por el coche eléctrico es Cadillac. La compañía americana anunció en 2021 sus planes para convertirse en marca 100% eléctrica en 2030. Parecía que todo iba por buen camino para conseguir ese objetivo, incluso Rory Harvey, que en aquel momento ocupaba el cargo de vicepresidente, se aventuró a decir que “no venderemos motores de combustión interna". Sin embargo, ahora la marca ya no renuncia a seguir fabricando coches de combustión.
Según explicó a
Automotive News el actual vicepresidente de Cadillac, John Roth, "ofreceremos una gama totalmente eléctrica a finales de la década y dejaremos que el cliente sea nuestro guía". Es decir, que Cadillac ofrecerá lo que los consumidores quieran: si siguen demandando motores de gasolina, pues los tendrá.
Mercedes, otra de las marcas que da un paso atrás con el coche eléctrico
Igualmente, el 22 de julio de 2021
Mercedes anunció que todos sus coches nuevos serían eléctricos a partir de 2030. Sin embargo, hace unos meses, el CEO de la compañía alemana, Ola Kallenius, reconoció que, “quizá, fuimos demasiado optimistas”. El fabricante de la estrella tenía previsto que la mitad de sus ventas fueran coches eléctricos en 2025 y no va a ser así.
Ante la desaceleración en las ventas de eléctricos, Mercedes se ha visto obligada a reducir sus exigencias y ha comunicado que seguirá produciendo motores de combustión más allá de 2030.
Hyundai
Hyundai es una marca que ha apostado fuertemente por el coche eléctrico y, en general, por la electrificación. Actualmente, cuenta con una oferta variada de modelos híbridos, híbridos enchufables y eléctricos. Cuenta con el Ioniq 5, el
Ioniq 6 (prueba) y el Kona eléctrico, y pronto se sumarán más.
La marca coreana ha dejado claro que continuará afianzando su posición dentro del mercado eléctrico, pero, al mismo tiempo, no abandonará los motores de gasolina, apostando por ofrecer varias opciones mecánicas.
Aston Martin, otra de las marcas que han dado marcha atrás en su apuesta por el coche eléctrico
Aston Martin tenía previsto lanzar al mercado su primer coche eléctrico en 2025, pero su plan se ha retrasado un año, hasta 2026, y no llegará a los concesionarios hasta 2027, según reconoció a
Autocar el presidente de la compañía, Lawrence Stroll. El cambio no se debe a un problema de la marca, que tiene los modelos de baterías preparados, sino a que no existe todavía un interés real por este tipo de automóviles, al menos, un interés en masa.
"Planeamos lanzarlo en 2025 y estábamos listos, pero parece que el interés por los coches eléctricos está más motivado por razones políticas que por demanda de los consumidores, particularmente a un precio de Aston Martin". La marca tendrá coches eléctricos, pero no en las fechas anunciadas previamente. Mientras tanto, se centrará en los híbridos enchufables.
Volkswagen
Terminamos con
Volkswagen, otra marca que ha pegado un volantazo su estrategia inicial y ha anunciado una inversión de 60.000 millones de euros en motores de combustión. A finales de 2022, el fabricante alemán dijo que vendería sólo coches eléctricos a partir de 2033 y el año pasado estimaba que las ventas anuales de eléctricos en Europa representarían el 80% a finales de esta década.
Pero, como ya hemos visto, la respuesta del mercado no ha sido la que esperaban en Wolfsburgo y el director financiero y de operaciones del grupo, Arno Antliz, anunció en un acto organizado por Reuters en Múnich una inversión de 180.000 millones de euros hasta 2033 para la nueva generación de vehículos eléctricos, de los cuales, una tercera parte, 60.000 millones, se destinarán a motores de combustión, con el objetivo de “mantener la competitividad de nuestros coches de combustión”.
Volvo
Volvo fue una de las primeras en prometer una gama de modelos totalmente eléctrica, allá por 2021. Todavía a finales de mayo de este año, el CEO de la marca sueca, Jim Rowan, afirmaba que una cartera de coches eléctricos únicamente era todavía “muy alcanzable” y aseguraba que la marca sueca podría terminar con las ventas de coches de combustión en sólo cinco años.
Sin embargo, apenas dos meses después, durante el último webcast trimestral para inversores celebrado a finales de julio, Rowan admitió que “llevará tiempo tender puentes entre las distintas partes del mundo para la electrificación total”. Finalmente, Volvo ha modificado sus planes y ahora el nuevo objetivo es que los modelos híbridos enchufables y los eléctricos puros representen entre el 90 y el 100% de las ventas anuales a finales de la década. Igualmente, ha reconocido que los coches de combustión se mantendrán más tiempo del estimado inicialmente, aunque serán microhíbridos y en un “número limitado”.
https://periodismodelmotor.com/marcas-dan-marcha-atras-apuesta-coche-electrico/404640/