Fotos Boschert B300 Gullwing: el Mercedes alas de gaviota del que nunca habías oído hablar

cybermad

Clan Leader
Boschert B300 Gullwing: el Mercedes alas de gaviota del que nunca habías oído hablar

15/03/2023

Boschert-B300-Gullwing-12.jpeg


Si tuviéramos que elegir un coche icónico dentro de Mercedes, probablemente ese sería el 300 SL Gullwing, el mítico «alas de gaviota». Un ejemplar que ha perdurado en la memoria de todos debido a su diseño irrepetible. Aunque lo cierto es que hemos visto otros ejemplares con esa configuración en las puertas, incluso creaciones que escapaban de cualquier límite de la imaginación. Es el caso del Boschert B300 Gullwing, una creación muy singular y totalmente única que ha pasado bastante desapercibida.


Su creador fue Hartmut Boschert, un ingeniero alemán que quería traer de vuelta ese recurso estilístico de la marca de la estrella en un coupé más actual. Tomo como base al Mercedes 300 CE (W124), aunque se le hicieron modificaciones muy notables que cambiaron por completo la estructura del vehículo. Para empezar, el morro era del Mercedes SL R129, de ahí que pueda llevar a engaño. Además, el pilar C fue adelantado 25 cm para poder llevar a cabo el sistema de apertura de las puertas al puro estilo de «alas de gaviota».

Boschert-B300-Gullwing-13-700x394.jpeg


Curiosamente, la transformación corrió a cargo de Zagato, que hizo un trabajo impresionante para que el diseño quedase integrado y fuera uniforme. Aunque lo cierto es que había más modificaciones en el Boschert B300 Gullwing. La mecánica M103 de seis cilindros y 3.0 litros fue mejorada con dos turbos Garrett y una solución novedosa para conseguir 287 CV de potencia. Después llegaron otros B300 con incluso más potencia gracias a los motores de 24 válvulas (el primero era de 12), pero nunca fueron lo mismo.

Porque solamente se hizo un Boschert B300 Gullwing con las «alas de gaviota». Al final, el proyecto era tan costoso que salía más caro que hacer el Clase S con motor V12 de finales de los 80. Nunca consiguió llamar demasiado la atención a pesar de que se ofreciera en una tirada limitada a diez unidades y con el de las puertas siendo exhibido por toda Europa. Ese ejemplar pasó a manos del sobrino de uno de los inversores del proyecto, que a su vez se lo vendió a un auténtico entusiasta del modelo.

Boschert-B300-Gullwing-15-700x394.jpeg


Tino Zovko era un niño que leía revistas de coches y se recreaba imaginándose conduciendo alguno de ellos el día de mañana. Con el tiempo se puso a investigar sobre el proyecto del B300, especialmente en ese con las «alas de gaviota». Cuando se presentó la oportunidad de comprarlo tuvo que vender su coche, hacer trabajos extra y pedir ayuda económica a su familia, pero consiguió comprarlo. Hizo falta algo de mantenimiento para devolverlo a la vida tras años parados, pero lo hizo funcionar y lo conservó durante muchos años.

Boschert-B300-Gullwing-9-700x394.jpeg


Incluso se puso en contacto con el propio Hartmut Boschert, que no dudó en darle todos los documentos y planos originales del vehículo. En 2019 lo puso a la venta a través de Facebook por nada menos que un millón de euros, que para él estaban justificados debido a la singularidad del vehículo. Sin embargo, parece que nadie le dió lo que pedía y que actualmente sigue conservando su Boschert B300 Gullwing con orgullo.
 

cybermad

Clan Leader
Mercedes no se atrevió a fabricarlo, pero el Boschert B300 podría haber sido el "alas de gaviota" moderno

30 Oct 2023
boschert-b300-p-720x326.webp


Los años ochenta fueron una época gloriosa para la industria del tuning en Alemania. De ella nacieron todo tipo de preparaciones, a cada cual más excesiva, que hoy recordamos con nostalgia y curiosidad. Una de las tendencias de la época era instalar puertas tipo “alas de gaviota” en coupés de lujo de Mercedes, algo en lo que incurrieron Gemballa o Sbarro. Sin embargo, muchos desconocen el delicioso Boschert B300. Se iban a fabricar 300 unidades, pero el proyecto quedó en un one-off, que muy pronto saldrá a subasta. Sí, podría terminar en tu garaje.



Hartmut Boschert quiso replicar el éxito de las preparaciones basadas en los Clase S Coupé – los C126, para aficionados a Mercedes – a una escala menor. El Boschert B300 fue presentado en el Salón de Frankfurt (IAA) del año 1989, y la idea de Hartmut era la producción a pequeña escala de 300 unidades. Su particular “alas de gaviota”, en verdad, estaba basado en un Mercedes 300 CE, la versión coupé de los Mercedes W124 – los Clase E de la época. Sin embargo, las profundas transformaciones acometidas lo transformaban en un coche completamente diferente.



El proyecto era tan ambicioso que Boschert incluso implicó a Zagato en el diseño y construcción del coche
Para empezar, tenía unas enormes puertas tipo “ala de gaviota”, pero esas puertas debían permitir el acceso tanto a las plazas delanteras como a las traseras. Por tanto, y con el objetivo de mantener unas proporciones correctas, fue necesario desplazar el pilar B del Mercedes 300 CE nada menos que 25 centímetros hacia delante. En una nota paralela, los Mercedes W124 Coupé (C124) no tienen pilar central, teniendo solo pilares A y B. La modificación del bastidor del 300 CE no terminó ahí: hubo que reforzar la parte inferior del chasis.

El motivo era que en su punto más largo, las puertas abatibles medían nada menos que 1,66 metros de largo. El frontal del coche no era el de un Mercedes C124, si no que se transplantó el morro de un Mercedes SL (R129), entonces recién lanzado al mercado, a la carrocería del W124. A pesar de todo, lo cierto es que estéticamente el coche era una preciosidad. En el interior, se instalaron los asientos de un Mercedes SL (R129) y se tapizó todo en una combinación de Alcantara y cuero lila, además de instalar un volante de aftermarket. Muy de la época.



Las puertas se accionaban de forma electrohidráulica, añadiendo peso, complejidad y coste al conjunto
La preparación no termina aquí. La mecánica del Mercedes 300 CE es un motor M103 de 3,0 litros, 12 válvulas y seis cilindros en línea, con una potencia de fábrica de 188 CV. Este motor recibió un kit de sobrealimentación con doble turbo Garrett. En la preparación se incluía un nuevo sistema de escape y un sistema de refrigeración firmada por Mosselmann. Quizá hubiera sido más sencillo montar un V8 de AMG en sus entrañas, pero el resultado final era muy contundente: su potencia máxima aumentaba hasta los 283 CV y el 0 a 100 km/h se reducía hasta los 6 segundos.

El coche retenía su cambio manual de cinco relaciones de serie, y se añadía a la ecuación una suspensión ajustable. El coche generó una gran expectación cuando fue presentado en el IAA de Frankfurt, pero había un gran “problema” con el B300: su precio de venta era de nada menos que 186.000 marcos – 95.100 euros de la época, casi 190.000 euros si lo ajustamos a la inflación en términos actuales. En 1990, un Mercedes 500 E costaba 134.520 marcos, un BMW M5 E34 arrancaba en 1992 en 120.000 marcos y un Mercedes SL, arrancaba en menos de 100.000 marcos.



La unidad subastada es un one-off, está 100% documentada y se vende con accesorios únicos de época creados por Boschert
Boschert esperaba producir 300 unidades del B300 “alas de gaviota”, pero en última instancia, solo recibió 10 pedidos en firme, y todos ellos eran para el B300 estándar, de puertas convencionales. El “alas de gaviota” presentado permaneció como one-off y ha estado en manos privadas desde el año 2005, bajo propiedad de un entusiasta de Mercedes. El coche será subastado por RM Sotheby’s próximamente. Tiene poco más de 39.000 km y se espera que su precio de venta supere los 250.000 euros. La exclusividad siempre tuvo su precio.
 
Arriba