También hay algo en la relación con la M que beneficia a todos los "no M"... Y es que cualquier BMW se beneficia de tener a hermanos sobrevitaminados con la M. Pensad en que el bastidor y muchos elementos de nuestras series comunes son los mismos que los que lleva un M, la línea estética, los packs, los interiores, etc... hace que todas las series "no M" estén más revalorizados que si no existieran los M... Es decir, un 440i se beneficia de tener un hermano M... Pero no sólo él, sino el más simple de los 316i. Esto es una ventaja para todos los propietarios de BMW, o de aquellas marcas que disponen de divisiones deportivas extremas (Audi, Mercedes...).
Muchas veces pensamos en el precio de un M nuevo y lo comparamos con un "no M" muy potente. Es verdad que en prestaciones todos van sobradísimos, pero como se dice por aquí la exclusividad, muchas veces la satisfacción, y sobre todo el valor real del coche en el mercado puede hacer que un M no sólo sea un gasto sino una inversión a futuro... El coche es caro, pero también lo será durante toda su vida cuando se decida (si se decide!) venderlo, y en estas circunstancias hasta puede salir rentable comprarlo. Prácticamente ningún otro coche deja de perder valor (o incluso lo gana con el tiempo) como un M.
En mi caso me quedaría con un M3. Dado que todos los M son muy exclusivos, le añadiría la practicidad de poder llevar mejor gente atrás. Y desde luego que esta última generación de M´s turbopropulsados es la más efectiva y rápida en conducción deportiva. Más exigente, eso sí, y de sonido menos atmosférico, pero con una patada absolutamente contundente que les hace volar a otro nivel respecto a las series precedentes. M3 ó M4, auténticas bestias vestidas de calle...
Saludos.