En Batman Begins pudimos ver este mitad coche mitad tanque, llamado acróbata, y un tipo lo recreó a la perfección. Coste, 70.000 dólares.
Bob Dullam es un fanático de Batman. Tanto, que cuando vio el coche que lucía en una de las últimas películas del murciélago, no dudó ni un segundo en ponerse manos a la obra y construirse el suyo propio.
Lo hizo totalmente con sus manos y solo partiendo de fotos que había visto y lo que observó en la película y este es el resultado. En total, entre 50 y 70 mil dólares de gastos para un coche con el que dudo mucho que pueda salir a la calle. ¡Pero qué más dá! Él tiene un batmóvil y nosotros no.
Ahora dice que va a construir el batavión, batcóptero o como se llame el vehículo de batman que vuela.
•Una réplica no tan igual. pero = de genial. Cogiendo un viejo corvette del 78 y metiéndole unas horas de trabajo, se puede llegar a tener un coche parecido al de Batman, el original. Pero solo parecido.
•Versión para pobres. Nada espectacular, solo hacía falta tener un coche negro y un par de cartones. Eso si, el logo y los cristales, muy bien pintados. Gasto, 30 euros y dos cervezas si te lo hacía tu primo el manitas.
Bob Dullam es un fanático de Batman. Tanto, que cuando vio el coche que lucía en una de las últimas películas del murciélago, no dudó ni un segundo en ponerse manos a la obra y construirse el suyo propio.

Lo hizo totalmente con sus manos y solo partiendo de fotos que había visto y lo que observó en la película y este es el resultado. En total, entre 50 y 70 mil dólares de gastos para un coche con el que dudo mucho que pueda salir a la calle. ¡Pero qué más dá! Él tiene un batmóvil y nosotros no.
Ahora dice que va a construir el batavión, batcóptero o como se llame el vehículo de batman que vuela.

•Una réplica no tan igual. pero = de genial. Cogiendo un viejo corvette del 78 y metiéndole unas horas de trabajo, se puede llegar a tener un coche parecido al de Batman, el original. Pero solo parecido.

•Versión para pobres. Nada espectacular, solo hacía falta tener un coche negro y un par de cartones. Eso si, el logo y los cristales, muy bien pintados. Gasto, 30 euros y dos cervezas si te lo hacía tu primo el manitas.
