Pues son buenos o malos, dependiendo contra qué o quién los compares.
En general, no son malos, y suelen cumplir su función. El error a veces es por parte del consumidor que espera de un producto, lo que no puede dar, o lo utiliza erroneamente.
En las descripciones de las etiquetas, también selen ser muy optimistas con lo que prometen. Error del fabricante.
También hay que tener en cuenta que NO sólo influyen los productos y accesorios usado, sino la técnica a emplear. Esto es importantísimo, y se suele pasar un poco por alto. ¿de que sirve pulir el coche si luego lo lavo con una esponja inadecuada?