Renault Arkana E-Tech, ya era elegante, ahora es 'ECO'
El nuevo Arkana E-Tech ya está disponible en España. Con un motor de 145 CV y un consumo menor a los cinco litros, suma eficiencia a un diseño elegante y refinado.
11/06/2021
Renault
El pasado mes de abril os hablamos del nuevo
Renault Arkana, un SUV cupé, o CUV, que la firma francesa iba a lanzar al mercado europeo después de un primer paso por Rusia. Este vehículo, completamente nuevo en el portfolio de productos de la marca, responde a varias necesidades y objetivos de la misma. En primer lugar, Renault ha querido apuntalar su apuesta por los
SUV, un segmento que ha reventado el mercado, quedando únicamente los compactos dando cierta guerra. Los crossover, de hecho, han desterrado a los todoterrenos, los familiares y hasta las berlinas a posiciones mucho más modestas en las listas de ventas.
La segunda necesidad es la de r
eposicionar a Renault en un escalón superior al que pertenece en el mercado, buscando competir en el mercado global mirando a los ojos a cualquier rival. Para ello, la marca quiere generar más valor por cada vehículo, centrándose en la calidad por encima de la cantidad. Todavía quedan años para que esta revolución se culmine, pero el Arkana es el primer paso, un SUV cupé de aspecto refinado y atractivo, avanzado y sostenible, de momento se ofrece con un
motor microhíbrido y otro híbrido no enchufable, de 145 CV de potencia, que hemos podido probar.
Nuevo pero reconocible
Renault
Así pues, el Arkana es un coche completamente nuevo, pero no supone, de momento, una revolución en la estética de Renault. Es fácilmente reconocible gracias a elementos como sus faros delanteros, que siguen mostrando esa firma lumínica en forma de ‘C’
visto en tantos coches, como el Mégane, el Captur y hasta el Clio; como su pequeña parrilla, escudada por un gran rombo, o por sus grupos ópticos traseros, con
la misma forma vista en el Mégane, cruzando todo el portón desde el logotipo del centro.
Es fluido en su diseño, de líneas suaves y sensuales. De perfil, se puede observar el trazo con el que sus diseñadores dibujaron la línea que va desde el capó hasta la trasera, conformando una imagen tan elegante como inédito en Renault. Tiene mucho de otros modelos de la marca, pero ostenta un
carácter propio que llamará la atención. Como siempre, apostar por el acabado R.S. Line, puede ser la opción inteligente, ya que añade detalles que acentúan una cierta deportividad que le sienta genial.
El interior es coherente, tomando componentes vistos en otros coches de Renault. Hablamos de la pantalla central vertical, de siete o 9,3 pulgadas, y del cuadro de instrumentos de 10,2 pulgadas. El sistema de infoentretenimiento es intuitivo, sencillo de usar y
compatible con los móviles más modernos. Sin embargo, la pantalla, como le ocurre al Clio, por ejemplo, es algo lenta en su respuesta. En general, la calidad del habitáculo es correcta. Renault sabe crear buenos acabados con
materiales asequibles, como plásticos duros y lo mismo ocurre en el Arkana, aunque su bonito diseño y la maestría de la firma francesa camuflan lo barato. Los asientos traseros son amplios y pueden acoger hasta tres adultos, aunque agradecerá si son solo dos, que podrán viajar cómodamente. El
maletero ve reducida su capacidad en esta versión híbrida hasta unos más que correctos 480 litros, suficientes para escaparnos en pandilla o en familia.
Siempre etiqueta 'ECO'
Renault
De momento, el Arkana llega a España solo con
motores ‘ECO’, un microhíbrido y un híbrido convencional, el E-Tech, que parte desde los 27.075 euros. Combina un motor de gasolina de 94 CV de potencia con dos motores eléctricos que le aportan un extra para ofrecer, en total, 145 CV. En marcha, gracias a la electrificación, gana suavidad y dinamismo, acelerando con más contundencia. Todo, mientras su transmisión automática se encarga de elegir la mejor marcha según la conducción y las demandas de potencia.
La versión híbrida consigue
reducir el consumo significativamente hasta quedarse casi siempre por debajo de los cinco litros. Por contra, gana algo de peso, por lo que en curvas puede sentirse algo más de balanceo, nada que no suponga un problema, ya que no presenta subviraje. Es un coche ideal para moverse por ciudad y autopista. Además, sus 20 centímetros de altura libre al suelo promete eficacia al salir del asfalto. Como no podía ser de otro modo, no llegará cojo de tecnología de seguridad activa, con un arsenal con sistemas como el control de crucero adaptativo o la frenada de emergencia con detección de peatones.