Tenemos, como consumidores, grabado a fuego el comprar y no reparar, salvo excepciones.
Compramos TV, y a la mínima avería, aunque tenga 6 años la TV, se le da la patada y nos decimos a nosotros mismos que no compensa reparar porque las nuevas tienen más de esto o de aquello, que es mejor vaya, pero volvemos a comprar una TV que no durará mucho más que la primera.
Idem con nevera, frigorífico, lavavajillas, herramientas... etc
No digo que todos encajemos en ese perfil, pero vivimos en una sociedad donde eso es lo normal. Y por eso triunfan la mayoría de productos low-cost, hasta tal punto que no los consideramos low-cost, para nosotros ya es el precio normal y pensamos que todo lo demás es ultra caro para ricos.