Lo siento mucho. Estos juicios civiles como el que planteas son un coñazo y agotan mucho. Y nunca, nunca, nunca, hay nada seguro, aunque parezca que lo tienes todo ganado. Pues el que tiene que “impartir justicia” puede ser un/una/une que en su vida ha visto un motor, ni hace por entender como funciona, y que ponga una sentencia (aunque sea recurrirle a una segunda instancia) que sea un absoluto impensable.
Al menos, imagino que habrá perito de una y otra parte. Eso sí que es una auténtica batalla de egos. Minutos de toma y daca que al menos luego recuerdas con cierto cariño.
Espero que salga satisfactoriamente para ti.