Falta estructural de repartidores, se necesita entre 500 y 600 conductores profesionales. Las empresas públicas “nos levantan los chóferes, que los formen ellos”. En construcción sin relevo generacional y falta de mano de obra. El comercio sufre en verano, con trasvase de empleados hacia sectores que ofrecen mejores condiciones, como la hostelería, a salvo de la escasez, y los supermercados. En el sector público faltan 400 policías y 3000 enfermeras. “Pagadles más y veréis cómo vienen” indica Ferran Portella, economista de la UIB.