MBK Daytona Cruiser
Un ciclomotor de puro talante yankee, chopper "de 50" ochentera
Cuando uno piensa en los ciclomotores de los 80 y los 90, imagina Vespinos, Cady, Peugeot 103 o las Derbi Variant. Máquinas simples, ligeras, pensadas para moverse por la ciudad o por el pueblo sin gastar casi nada, aunque se hicieran auténticas barbaridades con ellas. Pero en Francia, MBK decidió hacer algo completamente distinto: una chopper en miniatura. Así nació la
MBK Daytona Cruiser, un ciclomotor que parecía sacado de una postal de Daytona Beach, más que de una fábrica europea.
La MBK Daytona Cruiser era una motor bastante peculiar, y no por su aspecto chopper de larga horquilla y manillar alto, en realidad era una moto muy particular porque, básicamente, se podría incluir en el concepto “tubone”. Las tubone fueron muy populares en Italia y eran, por buscar una explicación rápida, algo así como un Vespino pero con el depósito en el propio chasis –por eso “tubone”, porque el tubo central que hacía de depósito era bastante grande–.
Tenía un sillón tipo custom, un escape en forma de cola de serpiente cromado, llantas de radios, guardabarros brillantes y una decoración que gritaba “Estados Unidos” por los cuatro costados. Incluso el manillar, alto y ancho, imitaba a las chopper. Todo ello basado, como decíamos, en el concepto “tubone”. La moto era, básicamente, un chasis con el tubo central hueco para guardar el combustible, y además, muy inclinado, como en las chopper yankees. El motorcillo, un monocilíndrico de 49 centímetros cúbicos, quedaba colgado justo bajo el depósito de combustible totalmente expuesto al aire -era refrigerado por aire–, era un dos tiempos de alrededor de 4 CV y en lugar de tener un cambio por variador continuo, tenía una transmisión manual de cuatro relaciones.
En el fondo, era un simple ciclomotor de dos tiempos con encendido electrónico y arranque a pedal, pero su imagen era todo un manifiesto: diversión y estilo por encima de la velocidad. De todas formas, no era una moto muy rápida, así que quien optara por ella no tendría problemas en pasearse por las calles, donde sería el centro de atención de todos los chavales de su edad. ¿Te imaginas aparecer con esto en la puerta del instituto allá por los años 80?
Nunca llegó a venderse oficialmente en España, y probablemente por eso hoy es una rareza casi desconocida. Aquí seguíamos fieles a los scooters o a los ciclomotores de estética deportiva, y la idea de un “mini-chopper” parecía demasiado extravagante. Pero viéndola ahora, cuesta no sonreír: en aquellos años, todo lo que tenía que ver con el rock y el metal, y también con la cultura americana, estaba de moda, y esto fue, quizá, rizar el rizo. No obstante, a España si llegó, mucho tiempo después, el concepto scooter custom con cierta aceptación. ¿No habría sido genial tener una moto como la MBK Daytona Cruiser con 14 años?