El pequeño de los joyeros Olivares, hace aproximadamente 9 años, me atendió en su bonita joyería en la calle Trapería en Murcia. No se, debió sacar conclusiones erróneas en base a mi vestimenta, pero yo contemplaba relojes de 1200 euros a 2000 que era el presupuesto que me puso mi mujer para regalarme por mi primera paternidad. Había un Longines en cerámica que me volvía loco, RWeils, algún Tag y el que finalmente me traje, un Hamilton.
Se emperró el señorito en ofrecerme y enseñarme Seikos de 500 euros, qué ya suponían una pasta para el tipo de reloj que era (cuarzos pelaos).
Y apareció la locución típica que en boca de un vendedor de productos de lujo suena presuntuosa y faltona. "¿Pero tú te puedes permitir los relojes que estás mirando?". Guancho, tal cuál, y no llevaba ni 15 minutos enseñando relojes.
Salimos mi mujer y yo de allí. Anduvimos por esa misma calle dirección catedral, me metí en otra joyería, será por pocas que hay, Del Campo Joyeros, donde me atendieron de pucha madre y sólo me hicieron una pregunta cuando tenía Longines, Oris y Hamilton encima de la mesa: ¿Si nos ponemos de acuerdo en precio sobre alguno de los relojes que tenemos delante, se lo llevaría en el momento?. Ya ves la sutileza entre un vendedor y otro. Sobra decir que saqué el Jazzmaster Maestro en esa negociación. Cronógrafo automático 45mm con un calibre 7750, normalito normalito. Le echo en falta más reserva de carga.
Sobra decir que a día de hoy, el primero de los "joyeros" ha terminado cerrando su joyería y se dedica en un cuchitril de local al nuevo segmento de relojes de mielda asociados a marcas de moda, que lo único que tienen es diseño y por dentro ná de ná (tipo ck, ea, ... ) .
P.D. Y sí, pasamos a visitarlo con el reloj en la muñeca y la bolsita con la caja de la otra joyería.