CUPRA Formentor (2021) | Primeras impresiones
La primera versión llega en noviembre a los concesionarios. Tiene 310 CV, está bien terminado y es agradable de conducir, además de rápido y eficaz. Las plazas traseras son las más estrechas entre sus competidores. Su precio, 44 920 €, es inferior al de sus alternativas.
CUPRA Formentor (2021) | Información general
Javier Moltó (
@javiermolto)
El Formentor es un
SUV de CUPRA de mayor tamaño que el
Ateca. Desde noviembre de 2020, se puede elegir con un motor de gasolina de 310 caballos, tracción total y cambio automático desde 46.920 €. Antes de final de año, podrá adquirirse con un motor de gasolina de 150 CV, cambio manual y tracción delantera y durante el primer trimestre de 2021 llegarán la versión
híbrida enchufable cuya potencia total es de 245 CV y la Diesel de 150 CV.
Es aproximadamente 1400 euros más caro que el CUPRA Ateca, y entre 14.000 y 19.000 euros menos costoso que dos de sus principales alternativas: el
BMW X2 M35i y el
Mercedes-AMG GLA 35 4MATIC+ (
ficha técnica comparativa). Todos ellos son coches de alrededor de 4,40 metros de longitud, poco más de 300 caballos de potencia, tracción total y cambio automático. El
Land Rover Range Rover Evoque y el
Jaguar E-Pace son otras de sus alternativas. Cuando lleguen las versiones menos potentes del Formentor, a esta lista de alternativas se añadirán el
Audi Q3 y el
Volvo XC40.
Listado de SUV que miden entre 4,35 y 4,55 metros y tienen de 270 a 350 CV de potencia.
Está desarrollado desde el principio por la marca CUPRA sobre la plataforma MQB-EVO, la misma que el
Seat León, a diferencia de los
CUPRA León y
Cupra Ateca, que están basados en modelos de SEAT. Mide 4,45 metros de longitud (ocho centímetros más que el SEAT León), 1,84 m de anchura (cuatro centímetros más) y 1,51 m de altura (cinco más). Es más largo y bajo que el Ateca e igual de ancho. La distancia entre ejes es de 2,68 m, que al compartir plataforma es idéntica a la del León 2020. El maletero tiene 450 litros de capacidad, 70 litros más.
En el interior de la edición Launch Edition, la que hemos podido tocar y conducir, CUPRA emplea materiales aparentemente caros y de buen aspecto. Los asientos, cuya tapicería combina tela y piel, tienen una forma y dureza que a mí me satisface mucho. Me encuentro muy cómodo y bien sujeto para conducir. El principal inconveniente de su interior, para quienes deseen llevar a cinco personas en el coche, es la estrechez de las plazas posteriores y la incomodidad del asiento central trasero (
más información en impresiones del interior).
La versión de gasolina que he conducido tiene 310 CV (10 más que el CUPRA Ateca equivalente). El motor es de 2,0 litros de cilindrada, con
inyección directa y sobrealimentación por un
turbocompresor. Se vende únicamente con tracción total (4Drive). La he conducido bajo una lluvia constante y la sensación general es buena, de mucho agrado de conducción.
Más información en impresiones de conducción. Con este motor las prestaciones del CUPRA Formentor son buenas: acelera de 0 a 100 km/h en 4,9 segundos y alcanza 250 km/h de velocidad máxima.
La versión híbrida enchufable —que da 245 CV— es siempre de tracción delantera. Tiene dos motores: uno de gasolina de 1,4 litros (1.4 TSI) de 150 CV y otro eléctrico de 115 que se alimenta de una batería de iones de litio de 13 kWh de capacidad. Tiene una autonomía de 50 kilómetros en modo eléctrico según el
ciclo WLTP y, por ahora, no conocemos sus prestaciones. Las versiones de 150 caballos de potencia, gasolina y Diesel, también serán de tracción delantera.
Las dos versiones más potentes del CUPRA Formentor, que son las que antes llegan al mercado, tienen una caja de cambios automática de
doble embrague (DSG) de siete relaciones cuyo mando selector es eléctrico. Se pueden elegir marchas manualmente desde unas levas situadas detrás del volante. El tamaño de estas levas crece notablemente con relación a las que utilizan en Seat.
La suspensión de serie lleva amortiguadores de dureza variable (DCC) y los frenos son opcionalmente de la marca Brembo. Las llantas son de 19 pulgadas de diámetro y pueden ir pintadas en color cobre.
Los asientos llevan los reposacabezas integrados en el respaldo (son de tipo semi-
baquet) y la tapicería se puede elegir en color negro u, opcionalmente, azul (Azul Petrol; 1675 euros en combinación con la regulación eléctrica y la calefacción en los asientos delanteros). CUPRA dice que «el conductor se sienta en una posición más baja, ergonómica y deportiva», aunque no dice con respecto a qué.
El sistema multimedia está compuesto por una pantalla táctil de 12 pulgadas en el centro del salpicadero (
imagen). Algunas de sus funciones se pueden manejar mediante gestos y con la voz. Es compatible con
Apple CarPlay (sin cables) y con
Android Auto. Está conectado a internet (lleva instalada una tarjeta SIM) lo que permite acceder a algunos servicios en línea, descargar aplicaciones y acceder a datos del vehículo a distancia. Por ejemplo, se puede saber dónde está aparcado, su estado y los datos del viaje. En la versión híbrida enchufable, el conductor puede programar de forma remota la carga de la batería y ajustar la temperatura del habitáculo. Opcionalmente, se puede pedir con un equipo de sonido BEATS de más potencia que el de serie y con techo eléctrico de cristal panorámico.
La carrocería se podrá elegir pintada en cuatro colores metalizados denominados Plata Urban, Negro Midnight, Magnetic Tech, Blanco Candy, Gris Graphene Grey, Dark Camouflage y Rojo Desire. También habrá dos pinturas mate: Azul Petrol Matt y Magnetic Tech.
CUPRA mostró el aspecto del Formentor con el prototipo del mismo nombre (
información).
El CUPRA Formentor está realizado sobre la misma plataforma que el
CUPRA León y que el
SEAT León. Por este motivo, los interiores de todos estos coches tienen un aspecto común inconfundible. La pantalla de doce pulgadas preside la parte superior del salpicadero, que tiene en común con el SEAT y con el CUPRA León una ausencia militante de botones. Todas las funciones que tradicionalmente se gestionaban mediante botones situados en el salpicadero (sonido y climatizador, principalmente) se ejecutan a través de la pantalla, de mandos en el volante o directamente por voz.
No tengo una opinión rotunda sobre el funcionamiento de este sistema sin botones que he probado en el
Volkswagen ID.3, los SEAT y CUPRA León y el Formentor. En el Formentor, en el ID.3 y en el SEAT León, poner a cero las cifras del ordenador de viaje me parece un engorro insufrible. No se puede hacer a través del volante y el proceso para hacerlo a través de la pantalla central es larguísimo. En el CUPRA León está mejor solucionado. También hay que hacerlo a través de la pantalla central, pero de una manera más sencilla que en el Formentor.
La gestión del climatizador a través de la pantalla también me parece un engorro. Los botones táctiles no dan respuesta de si se ha interactuado con ellos o no, por lo que después de dar al botón hay que mirar a la pantalla para ver si por ejemplo te ha obedecido para subir dos grados la temperatura. Hay botones táctiles que dan respuesta y que permiten a quien los toca saber si ha interactuado con ellos o no.
La solución, en todo caso, pasa por utilizar el sistema de reconocimiento de voz, que funciona muy bien como reconocedor de voz, pero que no tengo tan claro que responda con la precisión que yo quiero. Por ejemplo, al Formentor le he dicho:
—Coche, tengo frío en las manos.
Me ha respondido, literalmente:
—Ok, se calientan las manos en la parte delantera.
Y efectivamente ha llegado aire caliente a mis manos.
Pero yo no quería aire. Sólo quería calefactar el volante. Lo cierto es que para calefactar el volante hay un botón en el mismo volante y está muy bien. ¿Pero si para calefactar el volante hay un botón, por qué para subir la temperatura un grado en los pies no hay otro botón o una ruleta?
No tengo opinión formada. Sé que me cuesta realizar operaciones con los mandos del volante y en la pantalla central. Que no consigo acceder a los diferentes menús de la instrumentación con la facilidad que me gustaría, pero quizá sea por falta de uso. Seguramente, el propietario de este coche deje de dudar y de pulsar teclas equivocadas tras dos semanas de uso y de consultar el libro de instrucciones.
Aparte de la instrumentación, las pantallas y los mandos, el interior de la unidad Launch Edition del CUPRA Formentor que he conducido, con equipamiento cerrado y lujoso, resulta acogedor y atractivo. Los asientos recogen el cuerpo, lo sujetan y hasta diría que lo miman. La palanca para poner el coche en movimiento (
imagen), tanto sea hacia adelante como hacia atrás, tiene una lógica extraña. Para ir hacia adelante hay que moverla hacia atrás y para ir hacia atrás hay que moverla hacia adelante. Es verdad que en muchos cambios automáticos ha sido así toda la vida. La posición P estaba delante de todo y para avanzar había que retroceder la palanca. Con todo, en este coche no es así. El mando tiene un punto central al que retorna siempre cuando se suelta. Desde ese punto central, para ir hacia atrás hay que empujarlo hacia adelante y para ir hacia adelante hay que tirar de él hacia atrás.
El principal inconveniente del CUPRA Formentor es la estrechez de las plazas traseras. Según mi medición, a la altura de los hombros es un centímetro más estrecho que el SEAT León, que ya es estrecho. El Formentor, que por altura de carrocería parece un coche destinado a familias, es uno de los menos indicados del mercado para llevar a tres personas, niños incluidos, en los asientos posteriores. No sólo por la escasez de anchura de la segunda fila de asientos. El túnel central es muy voluminoso y para acabarlo de rematar, el respaldo del asiento central, como ocurre en muchos coches, no permite un buen apoyo ya que su forma está condicionada por el reposabrazos. Es un coche para como mucho cuatro ocupantes.
Tabla comparativa de espacio posterior en modelos similares en precio, tamaño y potencia (futuras versiones del CUPRA Formentor incluidas) al CUPRA Formentor:
Espacio en plazas posteriores
Jaguar E-PACE
Mercedes-Benz GLA
BMW X2
Audi Q2
CUPRA Formentor
Anchura
142
138
137
132
132
Longitud
71
73
70
68
72
Altura
95
95
93
95
97
El día en que lo íbamos a conducir, el CUPRA Formentor nos recibió con un diluvio. Diluvio a ratos, y en otros lluvia ligera. Un mal día para mirar el coche con detenimiento porque no ha parado de caer agua, pero un buen día para probarlo a fondo y disfrutarlo. Los días de lluvia son excelentes para dedicarse a conducir y a comparar las diferentes posibilidades de regulación del CUPRA Formentor. En realidad, la característica que más me ha llamado la atención es las prácticamente ilimitadas combinaciones de conducción que pueden adoptarse en el coche. Tantas y de tan diferentes formas, que no sé si el conductor tiene forma de aclararse.
Inicialmente, mediante el botón CUPRA situado en el volante, el conductor puede elegir entre los modos «Comfort», «Sport», «CUPRA» y «Off road», que vienen establecidos en la configuración del coche y no se pueden configurar. Cada uno de estos modos de conducción afecta a la dureza de la amortiguación mediante la regulación del «DCC» (Dynamic chasis control), la tracción total, la dirección, también influida por el «DCC», la respuesta del motor, el sonido del motor, el sistema de control activo de la velocidad de crucero (ACC) y a la climatización.
Además de estos cuatro programas establecidos, existe la posibilidad de regular cada uno de estos componentes por separado, en una quinta modalidad denominada «Individual». Se puede poner la dirección en modo «CUPRA», el «DCC» y el sonido en «Comfort» y la respuesta del motor en modo «Sport», por ejemplo. En CUPRA no me han facilitado los detalles de cómo afectan estas regulaciones. Por ejemplo, no sé cómo cambia la tracción total ni la curva de respuesta del motor. No sé si se transmite más par hacia las ruedas posteriores en la posición «Sport» que en la «Comfort», aunque supongo que sí. Tampoco sé si en la posición «Sport» o en la «CUPRA» el motor tiene más bajos o menos, o si no afecta a la curva de respuesta y sólo al tacto del acelerador. He intentado averiguarlo al conducir el coche, pero las diferencias, en todo caso, son pequeñas y sin un cronómetro y más tiempo de pruebas no he sido capaz de distinguirlas.
De momento, lo único que sé es que la dirección tiene una
desmultiplicación progresiva de forma mecánica y por tanto no varía de un modo a otro. Lo único que varía es la asistencia y por lo que yo he notado bajo el agua, la diferencia no es notable. También es cierto que en el coche que he probado, equipado con «DCC», la asistencia de la dirección varía automáticamente, por lo que no estoy seguro de que al cambiar el modo de conducción no se solapen las curvas de las tres diferentes asistencias de la dirección: «Comfort», «Sport» y «CUPRA». Ocurre lo mismo con la diferencia en la dureza de la amortiguación, que también varía con la velocidad. Al probarlo sobre agua no he sido capaz de advertir diferencias entre los modos «Sport» y «CUPRA».
También hay tres sonidos, que no varían únicamente en volumen, también varían en tono. La diferencia de sonido entre «Comfort» y «CUPRA» es muy clara. Para percibir la diferencia entre «Sport» y «CUPRA», sin embargo, es necesario prestar más atención, aunque a mi juicio se diferencian con más claridad que otros parámetros. Con la dureza de los amortiguadores apenas he probado, por lo que no sé responder si se nota mucho o no al modificarla. Lo que sí queda claro, según el gráfico que muestra la pantalla del coche, es que el rango de regulación de la dureza de amortiguadores es muy amplio.
No acaba aquí la posibilidad de regulación, porque dentro del programa «Individual» existe la posibilidad de elegir la opción «Eco», tanto para el climatizador como para la respuesta del motor. A través del «botón CUPRA» no se puede elegir una modalidad de conducción que sea «Eco», pero sí puede hacerse a través de los menús «Individual» de la pantalla.
Me hubiera encantado probar en un tramo de carretera cerrado al tráfico y mojado, como estaba hoy el asfalto, para experimentar con las diferentes combinaciones. Pero para hacer pruebas sosegadas habrá que esperar. Lo que sí puedo decir tras conducir el CUPRA Formentor es que el tacto en agua es excelente, y seguramente buena parte de la responsabilidad se deba a los neumáticos Bridgestone Turanza T 005 (en medidas 245/40 19), que me transmitían confianza en la entrada de la curva, para trazar sin titubeos y con un resultado final que confirmaba la sensación al inicio del giro. Estoy completamente seguro de que esa sensación de confianza y de eficacia que se tiene sobre mojado será exactamente igual sobre asfalto seco, porque el SEAT León, un coche elaborado sobre esta misma plataforma, transmite esa confianza y sería extrañísimo que en el CUPRA Formentor, con las suspensiones modificadas, no se mantuviera esa respuesta. Los frenos, cuyos discos se ofrecen en dos medidas diferentes, de 310 mm (de serie) y 370 mm (opcionales Brembo), complementan el conjunto.
Otro factor que me sorprende es que no se pueda regular por separado la respuesta de la caja de cambios en las configuraciones de «Individual». Cuando se selecciona el modo «Sport», los cambios de marcha se producen a un régimen más elevado, así que entiendo que la respuesta de la caja de cambios va asociada a la selección del modo «Sport» para el motor. Sin embargo, uno puede querer cambiar la respuesta del motor y no modificar el régimen de giro de los cambios de marcha. Pero necesito más kilómetros en el coche para probar detenidamente todos estos detalles. Las palancas para cambiar de marchas manualmente, situadas tras el volante, son claramente mayores que en los SEAT, por lo que, si hace falta cambiar a mitad de una curva, se encuentran con mayor facilidad, aunque giren con el volante. El volante de tope a tope da poco más de dos vueltas.
Por su respuesta y reacciones y por el tacto de la dirección en cualquiera de las modalidades, es un coche que apetecerá conducir a quienes disfruten de conducir, porque tiene un tacto sólido y de calidad. El CUPRA permite conducir rápido por curvas, pero no me refiero a quienes disfruten de conducir rápido. El tacto y las sensaciones son disfrutables también a velocidad moderada y baja. No tengo claro que tantas opciones para configurar los modos de conducción sean útiles, pero nadie obliga a utilizarlas. Del mismo modo que nadie obliga a desactivar el sistema de control de estabilidad, que está situado en el mismo lugar donde se sitúa el botón de arranque en el SEAT León. En el Formentor, el botón de arranque va situado en el volante (
imagen), en el cuadrante inferior derecho. En el cuadrante inferior izquierdo está situado el botón «CUPRA», que permite seleccionar los diferentes modos de conducción, aunque para configurar el modo individual es necesario actuar con la pantalla central.