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La fiesta de Pamplona y el encierro. - Sanfermin.com - Pamplona
Daniel Jimeno Romero, de Alcalá de Henares (Madrid), ha fallecido tras ser corneado en el tramo de Telefónica
Daniel Jimeno Romero, de 27 años, ha fallecido a las nueve menos cuarto de la mañana tras recibir una cornada en el cuello a la altura del tramo de Telefónica en el encierro de Sanfermin 2009 celebrado hoy con toros de la ganadería Jandilla. El corredor ingresó en el hospital en parada respiratoria y los facultativos ya no pudieron hacer nada por su vida. Según confirmó la consejera de Salud del Gobierno de Navarra María Kutz en rueda de prensa, el joven sufrió una herida intraclavicular que le hizo perder mucha sangre y, ya en parada cardiaca, fue trasladado al Hospital de Navarra, donde se le intentó reanimar, aunque ya se apreciaba que sus heridas eran incompatibles con la vida, según agregaron fuentes médicas del hospital. En el quirófano se le abrió el tórax y se confirmó que tenía el lóbulo superior izquierdo perforado, la vena cava arrancada y un puntazo en la aorta ascedente.
Según informaron desde el Hospital, el joven sufrió una herida por asta a nivel supraclavicular izquierdo con trayecto descendente.
En estos momentos el cuerpo del joven se encuentra en el instituto anatómico forense del Hospital de Navarra, donde se está trabajando en su autopsia. El joven portaba un anillo con una inscripción en castellano (Cristina, 25 de noviembre de 2003), lo que desde ese momento hizo pensar que fuera de origen español. Dos familiares –su madre y su pareja- ya se encuentran en el hospital. La consejera Kutz ha confirmado la identidad del fallecido.
Daniel Jimeno Romero, de Alcalá de Henares (Madrid), ha fallecido tras ser corneado en el tramo de Telefónica
Daniel Jimeno Romero, de 27 años, ha fallecido a las nueve menos cuarto de la mañana tras recibir una cornada en el cuello a la altura del tramo de Telefónica en el encierro de Sanfermin 2009 celebrado hoy con toros de la ganadería Jandilla. El corredor ingresó en el hospital en parada respiratoria y los facultativos ya no pudieron hacer nada por su vida. Según confirmó la consejera de Salud del Gobierno de Navarra María Kutz en rueda de prensa, el joven sufrió una herida intraclavicular que le hizo perder mucha sangre y, ya en parada cardiaca, fue trasladado al Hospital de Navarra, donde se le intentó reanimar, aunque ya se apreciaba que sus heridas eran incompatibles con la vida, según agregaron fuentes médicas del hospital. En el quirófano se le abrió el tórax y se confirmó que tenía el lóbulo superior izquierdo perforado, la vena cava arrancada y un puntazo en la aorta ascedente.
Según informaron desde el Hospital, el joven sufrió una herida por asta a nivel supraclavicular izquierdo con trayecto descendente.
En estos momentos el cuerpo del joven se encuentra en el instituto anatómico forense del Hospital de Navarra, donde se está trabajando en su autopsia. El joven portaba un anillo con una inscripción en castellano (Cristina, 25 de noviembre de 2003), lo que desde ese momento hizo pensar que fuera de origen español. Dos familiares –su madre y su pareja- ya se encuentran en el hospital. La consejera Kutz ha confirmado la identidad del fallecido.