*NANO*
Clan Leader
Porsche Macan 2024: primera prueba en circuito... de asfalto y todoterreno
Nos subimos al nuevo SUV deportivo de Porsche, que renuncia al motor de gasolina... ¡pero ofrece más potencia que nunca!
Que el nuevo Porsche Macan 2024 de esta prueba es un coche de una importancia capital para la marca de Stuttgart, seguro que ya te queda claro si has leído nuestro primer post sobre esta novedad, que supone el salto de Porsche al mundo de los SUV eléctricos...
Sin duda, un estreno que marca un antes y un después en la historia de la marca, con su segundo modelo libre de emisiones tras el Taycan, pero que a priori, en un vehículo de carácter deportivo como es el Macan, también trae buenas noticias.
¿No me crees? Pues de primeras, esta generación del Macan llegará el año próximo con más potencia que nunca, con datos en la versión tope de gama que quitan el hipo: más de 612 CV (más de 450 kW) y un par máximo superior a los 1.000 Nm.
Porsche Macan 2024: a prueba, jugando como local
Llegados a este punto, tengo una noticia buena y una mala para ti, con esta primera prueba del Porsche Macan 2024. ¿Empezamos por la mala? No he podido conducir el coche, sino sólo ver de lo que es capaz desde el lado de la derecha (también conocido como el asiento del miedo).
¿La buena? Que la experiencia tuvo lugar hace unas semanas en el Porsche Experience Center de Leipzig, Alemania, junto a la fábrica en la que se ensamblará el nuevo modelo (como ya lo hace actual). Y que probablemente, este sea el mejor lugar del mundo para probar un Porsche Macan...
Y ojo, porque esto no lo digo por decir. El Porsche Experience Center, situado junto a la ya mayor de edad fábrica de Leipzig (abrió sus puertas a principios de los 2000), cuenta con un circuito único en el mundo.
¿El motivo? En él se han replicado algunas de las mejores curvas del mundo: Bus Stop (Spa-Francorchamps), Parabólica y Lesmo (Monza), Sunset Bend (Sebring), Carrusel y Mobil 1 S (Nürburgring)...
Pero al mismo tiempo, si lo que buscas es un buen circuito de pruebas todoterreno, aunque el Macan sea un SUV eléctrico, aquí lo tienes. ¿Por qué? Porque algunos de los terrenos de la fábrica hasta comienzos de los años 90 fueron parte de una antigua base militar soviética (Leipzig formaba parte de la RDA). Y donde antes circulaban blindados soviéticos, ahora lo hacen todocaminos libres de emisiones...
Pero vayamos al lío. Tenemos un coche del que se han vendido 800.000 unidades desde su lanzamiento, con motores de gasolina y diésel. Y que tras 10 años de historia, se pasa por completo al lado eléctrico. A priori, el cambio no parece sencillo, pero lo hace anunciando dos versiones, de propulsión trasera y tracción total, que es justo la que probamos.
Un modelo que estrena la plataforma PPE del Grupo Volkswagen, que no ha tenido pocos retrasos y problemas de software en su desarrollo, que viene con un sistema de infoentretenimiento con tecnología de Google... Y de repente, todo deja de importar.
Porque mientras salimos del pit-lane a la pista, al conductor (un experto monitor de la escuela Porsche, con bastantes km de desarrollo del coche a sus espaldas) no se le ha ocurrido mejor idea que demostrarme lo rápido que es el coche acelerando desde parado. No tengo un crono a mano, desde luego, pero por cómo me aplasto contra el asiento, no me cabe duda de que el coche anunciará un 0 a 100 km/h cercano o por debajo de los tres segundos.
Vale, por si tenía alguna duda, me queda claro que estamos en un Porsche. Pero la cosa no queda ahí. Curva tras curva, empiezo a descubrir que el coche es ágil como pocos, que se siente ligero, que la dirección parece tan precisa como siempre (en este caso, complementada por el eje trasero directriz) y que el coche frena como lo hacen los modelos de la casa.
Y sin duda, ese es el punto que más me llama la atención... y que según me confiesa mi 'chófer', que más le ha costado desarrollar a los ingenieros de la marca. Porque en los coches eléctricos, debido a la frenada regenerativa, el tacto del pedal siempre parece un poco más artificial. Pero aquí, por lo que parece (y me asegura quien va al volante) se ha conseguido un buen tacto, que aporta confianza desde el primer momento.
También llama la atención el comportamiento neutro del vehículo, con un reparto de pesos del 48/52 y la inclusión de la suspensión adaptativa PASM de última generación (aquí no llega el nuevo Porsche Active Ride del Panamera).
Un sistema de doble válvula, que permite controlar individualmente el nivel de rebote y compresión de cada amortiguador. Y al final, lo que se percibe es un control casi absoluto de las sensaciones de balanceo y cabeceo de la carrocería.
Aunque lo que me termina de dejar casi sin palabras es la capacidad de tracción del nuevo Macan, que en esta versión tope de gama, con 4x4, incluye el sistema de reparto selectivo del par Porsche Torque Vectoring Plus, junto con un diferencial autoblocante mecánico en el eje trasero, con control electrónico.
Así, si quieres, puedes conseguir las trazadas más puras y precisas, si así lo quieres, o por el contrario, disfrutar de derrapadas durante metros y metros, si así lo deseas (y seleccionas el modo de conducción adecuado), con lo que parece una sensación de control absoluta.
Tras las emociones del circuito, toca dar paso a la conducción off-road, algo menos emocionante y, a buen seguro, mucho menos habitual en quien acabe comprando el año próximo el nuevo Macan.
Porque la verdad, me cuesta mucho ver el modelo superando vadeos de esos que casi llegan hasta los retrovisores, circulando sobre firmes totalmente rotos o superando rampas de más del 30% en su día a día... aunque por lo que veo, el coche lo puede hacer. Y encima, con un nivel de comodidad elevado y una capacidad de tracción bastante buena.
Pero lo dicho. No veo al comprador tipo del nuevo Macan enfrentándose a tales desafíos. Un futuro comprador al que no podemos dar un precio de venta todavía, pero sí algún dato interesante sobre autonomía.
Con una batería de iones de litio de unos 100 kW y una mayor densidad energética, junto a un sistema de 800 V, el Porsche Macan 2024 no sólo podrá superar los 500 km de alcance homologado en ciclo WLTP, sino que además, podrá cargar a un máximo de 270 kW, por lo que en condiciones ideales, debería de poder sumar 100 km de autonomía en apenas 4 minutos conectado.
Nos subimos al nuevo SUV deportivo de Porsche, que renuncia al motor de gasolina... ¡pero ofrece más potencia que nunca!

Que el nuevo Porsche Macan 2024 de esta prueba es un coche de una importancia capital para la marca de Stuttgart, seguro que ya te queda claro si has leído nuestro primer post sobre esta novedad, que supone el salto de Porsche al mundo de los SUV eléctricos...
Sin duda, un estreno que marca un antes y un después en la historia de la marca, con su segundo modelo libre de emisiones tras el Taycan, pero que a priori, en un vehículo de carácter deportivo como es el Macan, también trae buenas noticias.
¿No me crees? Pues de primeras, esta generación del Macan llegará el año próximo con más potencia que nunca, con datos en la versión tope de gama que quitan el hipo: más de 612 CV (más de 450 kW) y un par máximo superior a los 1.000 Nm.
Porsche Macan 2024: a prueba, jugando como local
Llegados a este punto, tengo una noticia buena y una mala para ti, con esta primera prueba del Porsche Macan 2024. ¿Empezamos por la mala? No he podido conducir el coche, sino sólo ver de lo que es capaz desde el lado de la derecha (también conocido como el asiento del miedo).
¿La buena? Que la experiencia tuvo lugar hace unas semanas en el Porsche Experience Center de Leipzig, Alemania, junto a la fábrica en la que se ensamblará el nuevo modelo (como ya lo hace actual). Y que probablemente, este sea el mejor lugar del mundo para probar un Porsche Macan...
Y ojo, porque esto no lo digo por decir. El Porsche Experience Center, situado junto a la ya mayor de edad fábrica de Leipzig (abrió sus puertas a principios de los 2000), cuenta con un circuito único en el mundo.
¿El motivo? En él se han replicado algunas de las mejores curvas del mundo: Bus Stop (Spa-Francorchamps), Parabólica y Lesmo (Monza), Sunset Bend (Sebring), Carrusel y Mobil 1 S (Nürburgring)...
Pero al mismo tiempo, si lo que buscas es un buen circuito de pruebas todoterreno, aunque el Macan sea un SUV eléctrico, aquí lo tienes. ¿Por qué? Porque algunos de los terrenos de la fábrica hasta comienzos de los años 90 fueron parte de una antigua base militar soviética (Leipzig formaba parte de la RDA). Y donde antes circulaban blindados soviéticos, ahora lo hacen todocaminos libres de emisiones...
Pero vayamos al lío. Tenemos un coche del que se han vendido 800.000 unidades desde su lanzamiento, con motores de gasolina y diésel. Y que tras 10 años de historia, se pasa por completo al lado eléctrico. A priori, el cambio no parece sencillo, pero lo hace anunciando dos versiones, de propulsión trasera y tracción total, que es justo la que probamos.
Un modelo que estrena la plataforma PPE del Grupo Volkswagen, que no ha tenido pocos retrasos y problemas de software en su desarrollo, que viene con un sistema de infoentretenimiento con tecnología de Google... Y de repente, todo deja de importar.
Porque mientras salimos del pit-lane a la pista, al conductor (un experto monitor de la escuela Porsche, con bastantes km de desarrollo del coche a sus espaldas) no se le ha ocurrido mejor idea que demostrarme lo rápido que es el coche acelerando desde parado. No tengo un crono a mano, desde luego, pero por cómo me aplasto contra el asiento, no me cabe duda de que el coche anunciará un 0 a 100 km/h cercano o por debajo de los tres segundos.
Vale, por si tenía alguna duda, me queda claro que estamos en un Porsche. Pero la cosa no queda ahí. Curva tras curva, empiezo a descubrir que el coche es ágil como pocos, que se siente ligero, que la dirección parece tan precisa como siempre (en este caso, complementada por el eje trasero directriz) y que el coche frena como lo hacen los modelos de la casa.
Y sin duda, ese es el punto que más me llama la atención... y que según me confiesa mi 'chófer', que más le ha costado desarrollar a los ingenieros de la marca. Porque en los coches eléctricos, debido a la frenada regenerativa, el tacto del pedal siempre parece un poco más artificial. Pero aquí, por lo que parece (y me asegura quien va al volante) se ha conseguido un buen tacto, que aporta confianza desde el primer momento.
También llama la atención el comportamiento neutro del vehículo, con un reparto de pesos del 48/52 y la inclusión de la suspensión adaptativa PASM de última generación (aquí no llega el nuevo Porsche Active Ride del Panamera).
Un sistema de doble válvula, que permite controlar individualmente el nivel de rebote y compresión de cada amortiguador. Y al final, lo que se percibe es un control casi absoluto de las sensaciones de balanceo y cabeceo de la carrocería.
Aunque lo que me termina de dejar casi sin palabras es la capacidad de tracción del nuevo Macan, que en esta versión tope de gama, con 4x4, incluye el sistema de reparto selectivo del par Porsche Torque Vectoring Plus, junto con un diferencial autoblocante mecánico en el eje trasero, con control electrónico.
Así, si quieres, puedes conseguir las trazadas más puras y precisas, si así lo quieres, o por el contrario, disfrutar de derrapadas durante metros y metros, si así lo deseas (y seleccionas el modo de conducción adecuado), con lo que parece una sensación de control absoluta.
Tras las emociones del circuito, toca dar paso a la conducción off-road, algo menos emocionante y, a buen seguro, mucho menos habitual en quien acabe comprando el año próximo el nuevo Macan.
Porque la verdad, me cuesta mucho ver el modelo superando vadeos de esos que casi llegan hasta los retrovisores, circulando sobre firmes totalmente rotos o superando rampas de más del 30% en su día a día... aunque por lo que veo, el coche lo puede hacer. Y encima, con un nivel de comodidad elevado y una capacidad de tracción bastante buena.
Pero lo dicho. No veo al comprador tipo del nuevo Macan enfrentándose a tales desafíos. Un futuro comprador al que no podemos dar un precio de venta todavía, pero sí algún dato interesante sobre autonomía.
Con una batería de iones de litio de unos 100 kW y una mayor densidad energética, junto a un sistema de 800 V, el Porsche Macan 2024 no sólo podrá superar los 500 km de alcance homologado en ciclo WLTP, sino que además, podrá cargar a un máximo de 270 kW, por lo que en condiciones ideales, debería de poder sumar 100 km de autonomía en apenas 4 minutos conectado.