Eso está claro!!!
No entiendo de leyes y no se exactamente lo que dice Australia ahora mismo, pero si hasta ahora el gobierno del pais había dicho que aquí no entra ni dios que no tenga completa la pauta de vacunas y con el Serbio han hecho la exención, han perdido todo el prestigio que hasta ahora tenían.
Si, la justicia es un cachondeo!!!
No soy abogado ni juez, por lo que ya anticipo que mi comentario tiene poco de gregario o endogámico ... Yo no lo creo, de verdad. Aún admitiendo que no es perfecto, como cualquier poder o institución del estado, quizás la justicia sea uno de los organismos más alejados del ciudadano en cuanto a su funcionamiento. No despierta mucho interés hasta que no te ves metido en algún proceso, por el cual aprendes "a la fuerza". Administrar justicia se basa principalmente en seguir procedimientos y debe ser así, porque esa es la garantía de que funcione como aspiramos. Las cosas no van como nosotros pudiéramos imaginar, y no es algo que nos enseñen en el cole, por lo que es completamente normal, que desde fuera, pueda dar una imagen de poca seriedad y de caos.
Como en casi todos los casos, este tema tiene múltiples aristas. Por un lado el mundo económico-deportivo: la federación de tenis australiana, los organizadores del torneo, los sponsors, etc ... (aquí están metidos los intereses políticos locales tamtién: dólares, proyección, publicidad, etc ...). Por otro el actor principal: el señor tenista (se me hace imposible escribir su nombre), que ha puesto por encima de cualquier otro factor sus intereses y preferencias personales (ayudado y promocionado eso si, por los primeros). El gobierno australiano (el central, el de todos), que tiene a gala seguir sus normas y procedimientos en sus fronteras. No olvidemos que son, aunque grande, una isla, y que ellos miran mucho el tema de lo que "entra", no sólo en virus, también en alimentación, especies animales, etc ... Tienen una normativa muy estricta para salvaguardar la flora y la fauna autóctona, y no tienen fama de hacer excepciones precisamente. La familia y los políticos del pais del tenista, que han convertido la causa en un circo mediático (a mi son los que más vergüenza ajena me provocan). Y por último, el juez, invitado forzoso al que le sueltan la patata caliente después de que va todo "envenenado" desde el principio. No es un asunto fácil.