Es que es lo primero que dice en su artículo el autor: "un coche deportivo no es un coche rápido, aunque pueda serlo y de hecho acostumbre a serlo, pero la rapidez no es definitoria de deportividad. Puede ser potente, puede ser bonito y puede producir el sonido del apocalípsis, pero eso no es deportivo sino tan solo factores que acostumbran a concurrir en un modelo de este corte. En realidad la deportividad está en lo gratificante que pueda resultar el empeño en su conducción. Un deportivo es un coche cuya conducción es más atenta, más dedicada, en la que se busca un comportamiento que recompense una conducción esmerada."
Esto no quiere decir ni más ni menos que la deportividad es intrínseca al carácter, no a la potencia en sí. Ese es el mal entendimiento que los talibanes de la potencia per se hacen. Asociar potencia y prestación pura con deportividad. El ejemplo claro lo ha puesto @
Gus con el Mazda MX-5 1.6, un "cochecito" que apenas es igual de rápido que un Golf 1.6, pero que sin embargo tiene una conducción exigente si se quiere ir todo lo rápido que la potencia de su motor permite.
Me resulta curioso que muchos estén hablando de que un coche de carreras es un coche tan eficaz que no se mueve ni se cosca... cosa que posiblemente dicen por la cantidad de coches de carreras que han conducido. :rolleyes:
Lo curioso es que esos coches de carreras que parecen tan estables, son estables porque los pilotos los conducen con extrema precisión. Porque, de hecho, su comportamiento suele ser tan afinado que mal llevados, o simplemente llevados por manos inexpertas, tienen un carácter crítico a menudo.
Os voy a poner un ejemplo de un piloto que conozco personalmente, y que imparte cursos en Ascari: el Seat Leon de Álvaro Fontes (actualmente compite con otro coche).
Este Seat Leon (con su tracción delantera y su canesú), por palabras de él, es muy crítico en curva. ¿Qué significa crítico? que es extremadamente sensible al levantar el pedal del gas en curva o en apoyo. Tiende de manera natural a cruzarse si se hace esto. Pero además no es una "cruzadita", es una sacudida y un trompo instantáneo.
¿Solución?, no levantar el pie en curva. O sea: gas a fondo. Lo que hace un PROFESIONAL. Por eso en carrera no los verás ir de costado. Porque van pilotados. No porque sean coches que van
sobre raíles. Que es lo que el público piensa.
Y esto es la norma, no la excepción. De ahí que ellos sepan valorar cuando un coche va "trincadísimo", empleando precisamente su argot. Así que si estos no son mimbres para probar y valorar un coche con "aspiraciones deportivas", pues ya diréis cuáles lo son...
