¿Sabías que Lamborghini también quiso hacerse un hueco entre las dos ruedas? Lo hizo con esta moto, la Lamborghini Design 90.
Lamborghini quería una moto que pudiese luchar de tú a tú con las mejores del mundo. Para su desarrollo y construcción se utilizó tecnología aeroespacial, permitiendo crear un cuadro ultraligero. El chasis, de doble cuna, era de acero tubular. El motor provenía de la Kawasaki Ninja GPZ900R. La carrocería, cuyo estilo quedó bautizado como “Aero”, estaba hecha de fibra de vidrio y cubría al completo la moto. Estos carenados cerrados fueron muy típicos a finales de los 80.
El propulsor Kawasaki de cuatro cilindros, 16 válvulas y 908 cm3 era capaz de entregar 115 CV a 9.500 RPM. Con una masa de 170 kilos, era suficiente motor para alcanzar los 250 km/h de velocidad punta. El resto de la parte de ciclo también estaba al nivel de una moto de sus características. Grandes discos de freno firmados por Brembo (los mejores que fabricaba en los 80), suspensión cortesía de Founalès, sistema de escape Devil y llantas ligeras fabricadas por Gotti específicamente para este modelo.