Con el que más he disfrutado, sin duda, Ferrari F430 en Montmeló, ya lo he contado por aquí varias veces. Por prestaciones, sonido de motor, equilibrio dinámico cerca del límite. Jamás pensé que una bestia así con motor central permitiría un ajuste tan fino y progresivo al límite. Me quedé muy impresionado.
En segundo lugar, y más importante porque está en mi garaje

, Boxster S 987, la verdad que me hubiera gustado que tuviera 50 ó 60 CV más, pero para andar por las carreteras de montaña de mi zona hay CV de sobra, y poder disfrutar de la conducción a cielo abierto, escuchando aullar al flat six detrás de mí, pocas cosas se le acercan
