Comparto con
@RADASON que hay características mucho más fácil de encontrar en gasolinas antiguos que en coches de gasoil: la inyección directa de gasolina también ha hecho mella en la suavidad y no recuerdo ningún coche comparable más suave y delicioso que la serie m50/52/n52.
Dicho lo cual comparto absolutamente opinión sobre el tema con
@nebur. Hasta el punto de que he comentado que reconozco que mi coche, x3m40i, se mueve mejor con motor de gasoil que de gasolina, sin entrar en consumos. Ambos enagañaos (turbo). Y sin embargo me lo compré de gasolina por algunos motivos objetivos y otros tan subjetivos como que me apetecía buscar de vez en cuando las 7000 vueltas, la suavidad a bajas o medias y la fuerza bruta en altas, el sonido…
Los tdi no engañan: si estás acostumbrado a un atmosférico con par lineal descuadra la entrega de potencia tan grande en un breve lapso de tiempo pero no corren más de lo que parece: corren lo que corren. Y el tdi de 150 A MI también me parecía que andaba más que el 320d, aunque este último superaba las 4500 con muchísima fuerza aún mientras el tdi ni llegaba (tampoco le hacía falta). Veo que esas sensaciones, compartidas con Rubén, se ven corroboradas en algunas mediciones crono en mano.
Lo curioso es que la ventaja de recuperar en cualquier marcha del diésel se “desvanezca” con el kick down de los cambios automáticos pero no así la desventaja de morir a 3800…
También es cierto que la posibilidad de ganar velocidad con celeridad sin necesidad de ruido interior o tirones suele ser un plus que el pasaje familiar agradece (o protesta cuando para adelantar no basta hundir un poco más el pie, sino que hay que buscar el kick down para salir como un cohete buscando la zona roja)