Última jornada, me despierto con ganas de conducir y tengo por delante la parte mas “aburrida” del viaje … estaré un poco loco pero me encanta la idea. Esta vez no tengo el desayuno incluido en el hotel por lo que le hecho un vistazo al mapa y veo que hay un cargador en un pueblo de la costa llamado Leucate que está a 115Km y allí me dirijo. En poco mas de una hora con el control de velocidad entre 110 y 115 Km/h consigo llegar con un 10% de batería y cual es mi sorpresa cuando todo va como la seda y comienza la recarga rápida y es ¡gratuita!. La verdad es que cuando hechas cuentas sobre los puntos de recarga fuera de la autopista, debes de tener en consideración que si están muy alejados puedes utilizar el 8-10% de la batería entre ir y volver a la autopista. En este caso no me importó, con la excusa del desayuno me encontré con un precioso pueblecito en la costa mediterránea pero no tuve tiempo de ver mucho pues la carga rápida tiene esa desventaja, en 30 minutos no puedes hacer muchas cosas.
Son las 10:30 de la mañana y ya estoy cerca de la frontera, el viaje por autopista me resulta mas aburrido, después de cruzar Suiza y bajar por la zona pre-alpina hasta la Porvenza…. esta zona no tiene mucho que ver desde el coche. Cruzo la frontera y llego al siguiente punto. Celrá en Girona, me tengo que salir de la A7 porque se encuentra en la NII dentro de la gasolinera Repsol.
Estoy un poco preocupado, contraté la tarjeta IBIL pero no me llegó a tiempo, por teléfono me aseguraron que podría utilizar la aplicación en mi móvil y recargaría sin problemas pero era la primera vez por lo que no estaba del todo convencido…
Cuando llego a la gasolinera y encuentro el cargador, tengo que desenredar los cables y quitar unas cuantas telas de araña… “bienvenido a España” pienso para mi y sigo con la mosca a ver que pasa. La maquina está encendida, conecto los cables y desde la aplicación digo que quiero comenzar a cargar… y magia! Aquello funciona perfectamente, se me cambia el semblante y me voy adentro. Maquina de café Nespresso, y un rincón/terraza que han montado para tomar algo mientras esperas, tienen hasta menú del día. A veces los sitios te sorprenden gratamente y éste es uno.
Después me llevo una pequeña desilusión, en los puntos de recraga IBIL, solo te recarga la batería al 80%, vale que a partir de ahí se ralentiza pero por lo que te cobran deberían dejar la decisión en tus manos, si quieres recargar un poco mas lento o no.
Salgo de Celrá cobre las 12:15h, tengo planificado parar en otras dos gasolineras Repsol con cargadores IBIL, la siguiente en Esparreguera (BCN) a la que llego a las 13:30h, está al lado de la autopista, recargo la batería y relleno el depósito de gasolina ya que desde aquí a casa hay demasiados km y tan solo otro punto en Zaragoza.
Voy tirando del extensor de autonomía por la autopista, mantengo los 110-115km/h y tengo que repostar en Fraga, relleno los 8,5 litros y tengo todavía el 62% de la batería.
Llego a Zaragoza y tengo que hacer desviarme por la circunvalación hasta que llego a un barrio nuevo completamente fantasma, no se ve un alma por la calle y eso que son las 17:30h ¡que pena de instalaciones!, un parque con un lago que imagino rellenar con el Ebro y la gasolinera completamente nueva y yo era el único cliente…
IBIL funciona bien, vuelvo al 80% y relleno gasolina, salgo pitando hacia la A2, esta ha sido la última recarga y cada vez tengo mas ganas de llegar a casa con mi mujer e hijo.
Tengo por delante la última prueba para el coche, estoy a unos 300m de altura y mi casa en las afueras de Madrid esta a 770m, entre medias vamos a subir a 1.200m por lo tanto quiero ver como se comporta el consumo en estas circunstancias.
Son las 18:30h cuando introduzco mi dirección por primera vez, quedan 279km y llegada prevista a las 21:00h. Una hora mas tarde vuelvo a rellenar el deposito en Cetina en el Km 202 de la A2… es la gasolinera mas cutre que he visto en mi vida…. No tiene pérgola, las cajas están en barracones pero eso si, una empleada muy simpática me echó la gasolina.
Continuo, ni me fijo en el consumo, tan solo quiero llegar lo antes posible por lo que comienzo a subir mi velocidad y realizo los últimos km a 120-130 el consumo se dispara pero tiro del Rex y llego a casa a las 20:30h.
Feliz y cansado, han sido 2211Km en tres jornadas, esta última de mas de 950Km. El coche parece que quiere seguir pero le miro fijamente a los “ojos” y le digo: “tranquilo que mañana… mas ;-)”.