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BMW M2 Competition (2018) | Información general
hace 2 días | Enrique Calle (
@QuiqueCalle)
El BMW M2 Competition reemplaza al M2 (
prueba del M2 2016). Tiene un motor distinto (de 411 CV en lugar de 370), además de cambios de aspecto y en el chasis. Estará disponible a partir de agosto o septiembre de 2018 (por el momento, BMW no nos ha podido precisar mejor la fecha de inicio de comercialización exacta).
El motor es de seis cilindros en línea y su cilindrada es 3,0 litros. La diferencia más importante del M2 Competition respecto al M2 es que tiene dos
turbocompresores —como el M3 y M4— en lugar de uno sólo. BMW ha tenido que añadir (al menos en algunos mercados) un filtro de partículas para cumplir con las normas de emisiones.
Al igual que el M2, se podrá elegir con un cambio de marchas manual de seis relaciones o uno automático (de doble embrague) de siete relaciones. Las prestaciones y el consumo son más favorables con el segundo, como se puede ver en
esta ficha comparativa. En el mejor de los casos, el M2 Competiton puede acelerar desde 0 a 100 km/h en 4,2 s. Un
Porsche 911 Carrera S PDK de 420 caballos la completa en 4,1 segundos. En España traerá de serie el paquete M Driver, con el que la velocidad máxima es 280 km/h en vez de 250 km/h.
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Los cambios más importantes de aspecto respecto a un M2 se centran en la parte frontal. Algunos de ellos no sólo tienen un papel puramente estético, sino que también sirven para facilitar la refrigeración del motor. Así, hay una nueva parrilla y entradas de aire más grandes en el paragolpes. Los espejos retrovisores son de dos brazos y BMW dice que cumplen una función aerodinámica, además de estética.
Dichos cambios resultan en un incremento en la
resistencia aerodinámica al avance. Así, el M2 Competiton tiene un factor de resistencia de 0,80, mientras que en el modelo anterior esta era de 0,77. El sistema de escape tiene un nuevo silenciador y cuatro salidas (acabadas en color oscuro). El flujo de gas de escape está controlado por dos mariposas, cuya función es alterar el sonido.
BMW también ha cambiado un poco la estructura del chasis. Para ello, hay una nueva pieza fabricada con plástico reforzado con fibra de carbono (CFRP) que une las torretas de la suspensión (
imagen) y sirve para incrementar la rigidez de la parte delantera de la carrocería, lo que supone, según BMW, una mayor precisión de la dirección. El peso de esta pieza es 1,5 kg. La dirección también tiene curvas de asistencia distinta. Por su parte, el
diferencial trasero activo (que puede llegar a hacer solidarias o completamente libres las dos ruedas posteriores) y el
control de estabilidad (DSC) tienen ajustes específicos. En la consola, a la izquierda de la palanca de cambios, hay dos nuevos mandos de acceso directo para variar la respuesta del motor, de la dirección (
imagen). Hay otro mando, justo detrás de la palanca de cambios, que sirve para ajustar la rapidez de funcionamiento del cambio de marchas automático. El volante tiene dos botones (M1 y M2) para guardar los ajustes preseleccionados por el conductor.
Los frenos son más grandes que los del M2 de 370 CV. Los discos delanteros tienen 400 mm de diámetro y los traseros 380 (los del M2 son de 380 x 370 mm de diámetro, delanteros y traseros respectivamente). Las pinzas delanteras son fijas de cuatro pistones y las traseras flotantes de dos. Hay unos frenos opcionales que suponen pinzas delanteras de seis pistones y traseras de cuatro, pintadas en color gris. Hay dos juegos de llantas de 19 pulgadas, las opcionales de aluminio forjado. Los neumáticos son los mismos que los del M2 (los delanteros unos 245/35 ZR19 93Y y los traseros unos 265/35 ZR19 98Y).
El interior puede tener unos asientos de tipo baquet (con los reposacabezas integrados en los respaldos,
imagen) con los emblemas M2 iluminados.