Última hora, la FIA cambia la normativa para GT3, DTM...de ahora en delante es obligatorio competir con X6, Range Rover, Levante, Bantayga, Q7...
El SUV tendrá sus clientes, como los tienen los deportivos biplaza o los coupe, los convertibles o las pick ups, y que siempre serán minoritarios, lo fueron y lo seguirán siendo, y el coche familiar, otro segmento y el mayoritario junto al utilitario compacto, va cambiando el diseño, el concepto, espoleado por la mercadotecnia para que el mercado se vaya reactivando, moviéndose continuamente y se muevan las ventas, por la necesidad imperiosa de las multinacionales. La rueda tiene que girar, con todos sus engranajes, desde le presidente de la compañía hasta la limpiadora del concesionario. Como en el mundo de la moda textil. No hay disquisiciones filosóficas sobre los conceptos exteriores de las carrocerías, basadas en la evolución de la inteligencia humana... ni pajones mentales varios para autojustificarnos de que nuestra elección es la correcta...porque el mercado, hoy, está así, cuando no hay cosa más voluble, n¡ manipulada y conveniente que el mercado.
La incorporación de la mujer al mercado laboral y su cada vez mayor representación en la sociedad también ha marcado mucho las líneas en este sentido. Son simples modas y necesidades del mercado creadas de antemano en despachos y disparadas, hasta el aburrimiento, en los anuncios después del Telediario de por la noche y en los intermedios de las películas. El concepto exterior no es evolución alguna, toda vez que, en simples cuestiones de estética, CX, centro de gravedad, no suponen mejora alguna. Entre un ranchera y un SUV hay una cuestión estética de moda, para le 95% de potenciales compradores, impuesta por la necesidad perentoria inoculada para el mercado y que, en un puñado de años necesitará volver a ser renovada. Ver en eso evolución del concepto del automóvil se me antoja bastante poco riguroso. Y tener una idea bastante peregrina de lo que va esto.